La autoestima es la percepción que tenemos de nosotros mismos. Abarca todos los aspectos de la vida, desde el físico hasta el interior, pasando por la valía o la competencia. Se trata de la valoración que hacemos de nosotros mismos, la cual, no siempre se ajusta a la realidad, ya que esa valoración se forma a lo largo de toda la vida y bajo la influencia de los demás. Lee hasta el final el post ya que hay una idea reveladora que va a facilitar su entrenamiento.
Para enmarcarlo correctamente vamos a presentar y comentar diferentes definiciones aportadas por grandes y reconocidos autores en este ámbito.
Olga Castanyer autora de Asertividad, expresión de una sana autoestima, que creo que es el libro que posiblemente más veces he recomendado en los últimos 15 años, define la autoestima de una forma que en Coaching Camp nos gusta mucho, y es: “Sentirse digno de ser querido y valorado con independencia de la opinión de los demás sobre ello”.
Personalmente me parece magnífica la idea de la independencia de los demás. A ver, que si, que vivimos con más personas, y las más importantes para nosotros nos influyen, de esto no cabe duda, pero, imagina por un momento que vivo con una persona que está pasando por una mala etapa, no nos muestra amor o no ha aprendido a relacionarse de manera asertiva o socialmente hábil en la vida, y esto le provoca que nos haga comentarios de minusvaloración y no reconoce mis capacidades, por ejemplo. Pues con independencia de lo que opine esta (o estas) personas, yo sigo siendo valioso y digno de ser querido, feliz y merecedor de lo mejor que me pueda ofrecer la vida. Ves la potencia de su idea.
Nathaniel Branden, autor de los 6 pilares de la autoestima, un libro ampliamente mencionado y referenciado en este campo, la define del siguiente modo: “La autoestima, plenamente consumada, es la experiencia fundamental de que podemos llevar una vida significativa y cumplir sus exigencias. Más concretamente, podemos decir que la autoestima es:
- La confianza en nuestra capacidad de pensar, en nuestra capacidad de enfrentarnos a los desafíos básicos de la vida.
- La confianza es nuestro derecho a triunfar y a ser felices; el sentimiento de ser respetables, de ser dignos, y de tener derecho a afirmar nuestras necesidades y carencias, a alcanzar nuestros principios morales y a gozar del fruto de nuestros esfuerzos.”
En cierto modo, hace un planteamiento más amplio, pero con la misma esencia que Olga Castanyer. Habla de que todas las personas tenemos capacidades y que valorarlas adecuadamente y sentirnos dignos y actuar congruentemente conforme a uno mismo nos ayudará en cada momento de la vida.
Según Enrique Rojas, en su libro ¿Quién eres?, la autoestima “se vive como un juicio positivo sobre uno mismo, al haber conseguido un entramado personal coherente basado en los cuatro elementos básicos del ser humano: físicos, psicológicos, sociales y culturales. En estas condiciones va creciendo la propia satisfacción, así como la seguridad ante uno mismo y ante los demás.”
El planteamiento de Enrique Rojas es muy interesante ya que amplia el concepto a los elementos básicos del ser humano, lo que nos lleva a pensar que puedo sentirme bien y sentir la autoestima sana en un plano de mi vida y no sentirla así en otro. Como de hecho puede ocurrir.
Ahora bien, la idea que te queremos aportar en esta línea es que no se debe generalizar, es decir, si no siento la autoestima sana, por ejemplo en el plano físico, lo recomendable sería no extenderlo a otros como por ejemplo el social o el cultural si en estos otros me siento bien.
La gran Marcela Lagarde nos lo plantea así: “…Subjetivamente la autoestima se sostiene y se nutre de un conjunto de capacidades que provienen de la individualización: la autovaloración, la autocrítica, la autoevaluación, la disposición a la responsabilidad propia, la asunción de decisiones propias. Y todo ello conduce a la vivencia de tener límites personales, es decir, a la diferenciación en relación con los otros y a la posibilidad de la autonomía entendida como definición y delimitación del yo.”
Volvemos a ver la importancia de la individualización e independencia de los demás. En este caso centrada en varios de los grandes «auto…» del desarrollo personal. Además, incluye los límites personales y la defensa de ellos, conectando de este modo la autoestima con la asertividad, capacidad imprescindible, en mi opinión, para disfrutar de una sana autoestima.
Una última reflexión, la autoestima no es algo que se tenga o no se tenga, sino que es un modo de relación con uno mismo. Párate a pensar un poco sobre esto ya que puede ser revelador para ti.
Independientemente de tu historia vital, hoy puedes influir sobre ella. Puede costar un poco más o un poco menos, pero se puede entrenar. Sanar la relación con uno mismo favoreciendo el “autoamor” y la «autoamabilidad» puede ser un buen paso para influir positivamente en tu autoestima.
Alfredo Bastida Caro. Codirector de Coaching Camp. Coach Personal y Health Coach. Experto en Inteligencia Emocional y Programación Neurolingüistica. Licenciado en Cc. de la Actividad Física y Deporte.